Fernando Herrera Martinez

El jefe Diego lo dice distinto. Escucha su opinión. Yo creo que a los partidos políticos de oposición no le cumplieron a México. Y no me refiero a los militantes de los partidos, sino a sus dirigentes. Porque más se preocuparon por estar jugando a las manitas calientes entre ellos, acomodarse en sus posiciones y desde luego proponerse a sí mismos para estar encabezando las listas en el Congreso como si fueran las flores más bellas de elegir. Lo que hicieron estos deleznables dirigentes no se vale y deberían irse a la calle. Aunque ahora estarán en el Congreso chupando la ubre. El jefe Diego defiende a la militancia. Eso no lo merece el PAN, el PRI ni el PRD, pero ya sucedió. Creo que los partidos políticos de oposición van a tener que entrar a un análisis muy serio, no de cuchillos largos, no de destrozarse entre nosotros, sino en todo caso de reflexionar qué podemos y debemos hacer por México. Y si no lo hacen estos dirigentes tramposos, el jefe Diego apuesta por la sociedad. Pero en la sociedad hay una oposición fuerte, vigorosa, presente y decidida a actuar. Yo creo que si los partidos políticos de oposición no se abrieron ni se van a abrir por alguna causa indebida a la sociedad, la sociedad debe de entrar a esos partidos por sus fueros. Y si no, fundar otras organizaciones. Yo considero, y fue mi lema a propósito de hace 30 años, de luchar por un México sin mentiras. Y yo creo que no podemos seguir soportando que el nuevo gobierno que va a entrar siga la tarea del que va de salida, de mentir todos los días. Así como te digo que la oposición no está debilitada ni moribunda, salvo que hablemos de los partidos, pero que en la sociedad hay millones de inconformes, millones de opositores que están presentes indignados frente a esos partidos políticos y frente al gobierno que está de salida. El jefe Diego deja claro que si los dirigentes no entienden, la sociedad sí está consciente de lo que quiere y de lo que no quiere. Es cierto que no acepta más al PRI, ni al PAN, ni a ningún otro, pero tampoco acepta a un gobierno que miente todos los días. 130 millones de mexicanos, de ellos 98 estamos en el padrón electoral y por la señora Shellman votaron 33. Ese no es la mayoría del pueblo. En todo caso, el abstencionismo nos ha ganado porque son 40 millones los mexicanos con credencial que no acudieron a votar y eso tiene un claro mensaje. Tenemos que ver inclusive que si solo contamos a 40 millones de abstencionistas, de ciudadanos con credencial de elector que no se les dio la gana darle la cara a México, esos 40 millones son más que los 33 que ganó la señora Shellman. Siguen 6 años de aguantar a algunos senadores indeseables porque hay algunos buenos, pero esos dirigentes que por cierto no quieren dejar sus partidos para seguir robando recursos de esas instituciones, deben saber que más tarde o más temprano la sociedad les pasará la factura.