Héctor Chávez

El estado de Chihuahua, con su extenso territorio y su diversidad tanto geográfica como cultural, ha sido siempre un baluarte de la identidad mexicana. Sus vastos desiertos, sus montañas majestuosas y su población resiliente y trabajadora son parte fundamental del tejido nacional. Así como Chihuahua ha sido pionero en muchas facetas de nuestra historia, hoy se nos presenta la oportunidad de sumarnos a una visión progresista y ambiciosa para el futuro de México, encabezada por Marcelo Ebrard.

Pero, ¿por qué deberíamos, los chihuahuenses, confiar y apoyar a Ebrard? A continuación, desglosaré algunos de los puntos clave que nos muestran que la alianza entre la visión de este político y el potencial de Chihuahua puede ser el impulso que necesitamos.

1. Experiencia en gestión de grandes territorios:

Marcelo Ebrard no es ajeno a la administración de territorios complejos y densamente poblados. Su labor al frente de la Ciudad de México, una de las metrópolis más grandes del mundo, le dio la experiencia necesaria para entender y atender las necesidades de una población diversa y exigente. Chihuahua, con su vasta extensión territorial, puede beneficiarse de alguien que sabe cómo dirigir grandes espacios y poblaciones.

2. Impulso a la infraestructura:

Durante su mandato en la capital del país, Ebrard demostró tener una visión clara sobre la importancia de la infraestructura para mejorar la calidad de vida de los ciudadanos. En Chihuahua, con nuestras necesidades de comunicación y transporte entre ciudades y pueblos, es fundamental contar con un líder que comprenda la importancia de invertir en carreteras, transporte público y otras infraestructuras.

3. Visiones progresistas:

Ebrard ha sido un defensor de los derechos y libertades de los ciudadanos. En una época donde el progreso social es fundamental, Chihuahua puede posicionarse a la vanguardia junto con un líder que comprende y promueve una sociedad más justa e inclusiva.

4. Enfoque en la seguridad:

Chihuahua ha enfrentado desafíos significativos en materia de seguridad. Ebrard, con su experiencia gestionando programas de seguridad y prevención en la Ciudad de México, puede aportar estrategias y soluciones que se adapten a las necesidades específicas de nuestro estado.

5. Relaciones internacionales:

Dada nuestra proximidad con Estados Unidos, Chihuahua tiene una posición estratégica en el contexto internacional. Con Ebrard al frente, con su experiencia como Secretario de Relaciones Exteriores, podemos estar seguros de que los intereses de Chihuahua serán bien representados y defendidos en el ámbito internacional.

6. Desarrollo sustentable:

Chihuahua, con su rica biodiversidad y sus desafíos medioambientales, necesita una visión clara de desarrollo sustentable. Ebrard ha mostrado en múltiples ocasiones su compromiso con el medio ambiente y la sustentabilidad. Al unir fuerzas, podemos garantizar un desarrollo que beneficie a los chihuahuenses actuales y futuros.

7. Conexión con la sociedad civil:

Ebrard ha demostrado a lo largo de su carrera una habilidad para conectar y trabajar de la mano con la sociedad civil. Las organizaciones y colectivos chihuahuenses podrían encontrar en él un aliado para llevar a cabo proyectos y programas de impacto social.

En conclusión, la figura de Marcelo Ebrard no es solo la de un político con experiencia, sino la de alguien que comparte una visión de progreso y desarrollo que puede resonar con las aspiraciones de los chihuahuenses. Es una oportunidad para unir caminos y construir un México más justo, próspero y seguro. Chihuahua tiene la posibilidad de ser parte fundamental de este proyecto. Apoyar a Ebrard es apostar por un futuro en el que Chihuahua y México marchen, de la mano, hacia un horizonte lleno de oportunidades y esperanza.