Erik Jurado

Piensa en uno de los grandes lideres de la historia y la humanidad. ¿Qué lo caracterizaba? Seguramente dirás que sus convicciones, valentía, buenas ideas, u otro atributo, pero lo cierto es que ninguna de esas sería evidente si no fuera por sus habilidades para comunicar. La política es un acto de comunicación.

Dicen los filósofos y lingüistas que somos animales simbólicos. Esto quiere decir que nuestros niveles de pensamiento y comunicación son superiores a los de otras especies sobre el planeta, debido a que tenemos la capacidad de abstracción y podemos dotar de sentido a los diferentes objetos del mundo. Somos individuos que pensamos de forma compleja, y nos comunicamos.

Sólo gracias a esa capacidad de conectar muchas cabezas por medio del lenguaje abstracto es que somos animales libres y políticos. Somos la única especie capaz de cambiar sus pautas sociales gracias a la comunicación y debate de ideas, hacemos cultura.

La comunicación es una habilidad fundamental en la vida personal, pero más en la esfera política, sin comunicación no hay política.

La política es una esfera que requiere que las personas sean capaces de comunicar de forma efectiva, que por medio de los diferentes elementos que componen a este proceso tan complejo se logre generar una visión diferente del mundo, o las formas de mejorar las condiciones de vida de las personas. La comunicación es el mecanismo inicial del cambio.

Bajo lo dicho se entiende ahora que es una tarea prioritaria desarrollar buenas habilidades de comunicación para el día a día, y para buscar cambios sociales, pues puedes tener todas las ideas, pero si careces de formación para expresarlas no habrá quien te apoye en su formulación y ejecución.

Hay algunas recomendaciones para ti joven que quieres incursionar en política y mejorar tus habilidades de comunicación; 1) Involúcrate en actividades donde tengas que hablar en público, todo es cuestión de práctica y observación, 2) explora tus propias habilidades de comunicación, imita a otros de inicio, pero identifica tu estilo, 3)  elige adecuadamente temas sociales que sean de tu interés y fomenta su análisis, 4) genera habilidades para el dialogo y la generación de acuerdos, tu país lo necesita, 5) documéntate y dale profundidad a tu discurso político.

En tiempo de las redes sociales y los dispositivos móviles, se ha ganado terreno en conectividad, pero perdido en habilidades y destreza, también en profundidad. Una de las improntas es volver a elevar el discurso político, y ahora hacer con mayor creatividad. Es tarea de todos romper con los estereotipos y la superficialidad de los temas, busquemos temas profundos y abordemos de manera creativa. Utiliza la tecnología, pero llénala de contenido de calidad.

Recuerda, la política es cosa de todos y comunicar efectivamente puede ser el mejor camino de examinar un mejor país.