Jesús Francisco Luján Vázquez

En tiempos pasados nuestros abuelos y luego nuestros padres preferían a los hombres modestos, pobres incluso, para que ocuparan los cargos de elección popular los preferían por sabios, serenos, experimentados y honrados a carta cabal.  

Hace muchos años el país y los partidos políticos olvidaron esta sabia receta de política practica y así nos ha ido. Corrupción, falsa conciencia, prevaricación, ineficiencia e ineptitud, prepotencia, lo que devino en el desprestigio de todo el sistema político mexicano y obviamente para los partidos que han alternado de poco tiempo atrás el poder.  

En estos últimos 24 años el partido que estuviese en el poder fuese el PRI, el PAN y ahora MORENA, postulaban algunos candidatos de la iniciativa privada, de las clases económicamente poderosas y hoy vemos, no solo eso, si no que la mayor parte de los candidatos provienen de la burocracia de los partidos, quienes, es claro, que representan ya a los grupos económicos de la iniciativa privada y al crimen organizado. Ellos son, los que antiguamente López Obrador tachaba de la mafia del poder y hoy como antes gobierna y vive en amasiato con ellos.  

Hoy el pueblo, la gente humilde, sea de donde sea, viva donde viva y siendo la mayoría, reclama vigorosamente que se deje de vender los altos cargos a quien mas dinero tiene u ofrecen por ellos, o bien, a los que tienen sexenio tras sexenio viviendo del erario publico saltando de un puesto a otro.  

Todo lo anterior viene a cuento recordarlo y señalarlo ahora que esta en marcha el proceso electoral, con las campañas “formales” todos los partidos tratan de atraer al electorado con sus “propuestas”, sin embargo (ya en estas páginas lo había dicho y lo sostengo) Morena y sus aliados solo repiten como loros lo que el presidente de la republica manifiesta o propone en la mañanera y por obvio que parezca son los programas del Bienestar y los viscerales ataques a sus opositores y contra todo aquel que se atreva a discrepar de sus puntos de vista, sin embargo, habría que hacer un sucinto recuento de sus más de 5 años de ser la cabeza del Estado Mexicano y a punto de concluir su mandato presidencial; pero antes, habría que tomar alguna referencia para poder ser más objetivos. Para iniciar como simple recordatorio, esta su machacona idea que manifiesta una y otra vez López Obrador ¡No somos iguales! ¡No somos iguales!  

Pues bien, en diciembre del 2010 Felipe Calderón presidente de la republica y el Partido de Acción Nacional (PAN) instituyeron una semana de festejos ¡Así festejos! Para celebrar los 10 años de gobierno panista ¿Pero que celebraban?, ¿El aumento de la pobreza?, ¿El déficit de 3 millones de empleos para jóvenes que año a año llegan a la vida productiva?, ¿Los mas de 30 mil muertos en su guerra contra la delincuencia organizada y el narcotráfico?, ¿La corrupción en PEMEX y el IMSS?, ¿Qué la detención de los capos de la droga fue fruto de la actividad unilateral e intervencionista de las agencias de inteligencia gabacha y no del gobierno calderonista?, entonces ¿Qué es lo que Felipe Calderón y el PAN celebraban?.  

Las mismas preguntas con su respectiva respuesta serían para López Obrador y su partido Morena. Sin embargo y a fin de obviar espacio hare un recuento rápido para que el publico lector se de una idea de lo sucedido hasta ahora del presente sexenio: la pobreza extrema creció 7.1%, de la población económicamente activa (PEA) el 54.7% esta en la informalidad, el déficit de empleo es del orden de 9.39% siendo el mayor en 29 año y esto en parte explicaría la delincuencia, la migración e informalidad; se tiene un crecimiento del producto interno bruto solo del 0.8%, las más de 800 000 muertes derivadas de la nefasta estrategia para enfrentar el COVID, son mas de 176,000 muertos con su estrategia de abrazos y no balazos contra la delincuencia organizada y el narcotráfico, la corrupción está a todos los niveles, siendo la mas escandalosa la de SEGALMEX y la propiciada por los hijos del presidente. La detención de Ovidio Guzmán; más bien fue producto de la presión del gobierno estadunidense y finalmente habría que destacar el aumento de la deuda externa hasta por 5 billones de pesos.  

Entonces, después de este apretado resumen, tendremos que concluir también que AMLO y Morena que es lo que presumen, que resultados festejan, si las propias obras insignias de la administración con sobrecostos y aún después de ser inauguradas siguen sin funcionar y siendo subsidiadas con recursos del erario público y lo más probable deuda pública.  

Por ello, habría que insistir que el pueblo de México debe de seleccionar bien a quien o a quienes lo representaran en el gobierno de la república, como hemos visto líneas arriba “tan malo el pinto como el colorado”.  

Se requiere que el pueblo trabajador tome conciencia de la necesidad que existe de organizarse independientemente de los partidos tradicionales y forme el propio, uno que verdaderamente represente sus intereses y que busque la transformación social en todos los ámbitos de nuestra vida y haga a un lado el régimen de partidos actual que solo lo ven como mascotas y dadores de votos.