POLÍTICA REAL

La semana pasada se dio una actividad inusitada y concertada del presidente ucraniano Volodymyr Zelensky, primero se reunió con la liga árabe, después con el grupo de los 7 países más industrializados del mundo, el motivo fue solicitar más apoyo económico y armamentista para hacer frente a la “invasión” rusa, la respuesta ante semejante petición es obvia, sin embargo, habría que hacer algunas precisiones sobre lo que pasa en Ucrania.

Primero hay que dejar sentado el hecho indiscutible e incontestable que Ucrania formó parte desde el año 882 del estado medieval de la Rus de Kiev y cuyo territorio los rusos lo anexaron completamente y definitivamente en 1764, no obstante, de haber una serie de movimientos sociales y anexionistas de Polonia y del imperio Austriaco por querer quedarse con una parte del territorio ucraniano; no es hasta la revolución Bolchevique Rusa que pasó a formar parte de la URSS.

También es claro que a raíz que M. Gorbachov implementó la Perestroika y la Glasnost se desintegró la URSS y con el gobierno del dipsómano de Boris Yeltzin acabaron por desmantelar el aparato económico, político y militar; propiciando con ello el surgimiento de movimientos separatistas y sobre todo la prevalencia en algunos de ellos corrientes ultranacionalistas; la otrora potencia que fue la URSS se convirtió en un país pobre.

En este contexto se da en Ucrania la revolución naranja, que impregnada de europeísmo, el constitucionalismo y el liberalismo, movimiento que  impido llegar a Yanukovich (pro-Ruso) al poder en las elecciones del 2010, pero volvió a participar en las del 2014 ganando con un amplío margen la presidencia de Ucrania, sin embargo un movimiento llamado ´´euro median´´ dirigido por el grupo ultranacionalista (sector derecho), así cómo el partido parlamentario Svoboda y la iglesia ucraniana, apoyados por la OTAN y la CIA., organizaron disturbios sociales en todo Ucrania que orillaron a la Rada Suprema (parlamento unicamaral) a perpetrar un golpe de estado destituyendo al presidente Yanukovich quien se asilo en Moscú.

Desde el 2014, quienes se hicieron con el poder en Ucrania, mediante purgas fueron eliminando a sus opositores e iniciaron el asedio, atropellos y masacres en aquellas provincias o regiones pro-rusas; son las huestes nazistas quienes han gobernado desde entonces, ahora con Volodymyr Zelensky a la cabeza.

La adhesión de Crimea a Rusia y el apoyo de ésta a la independencia soberana de Donetsk y Lugansk fue lo que orillo a la unión Soviética a intervenir militarmente para salvaguardar a la población pro rusa y para evitar que en Ucrania se establezcan bases militares de la OTAN.

Ahora bien, la embestida del imperialismo en contra de Rusia (encabezado por EU y la Unión Europea) no se hizo esperar, aplicando sanciones económicas primero y luego apoyando con armamento, equipo táctico, medios propagandísticos con la prensa internacional, así mismo con recursos económicos y mercenarios a Zelensky y sus huestes Neo Nazis.

Para el pueblo ruso esto no es nuevo ya que en los últimos dos siglos ha soportado tres grandes invasiones.

En 1812 Napoleón Bonaparte al mando de 691,000 soldados, el mayor ejército formado en Europa en aquella época, penetró Rusia llegando hasta Moscú, sin embargó, la encontró abandonada e incendiada, helada y sin alimentos; el crudo invierno, sin comida ni pertrechos, Napoleón tuvo que abandonar la Rusia Zarista; había perdido 500 000 hombres, su ejército quedó reducido a un 20 %, este fue el principio del fin del imperio napoleónico.

En 1914 Alemania invadió Rusia una sangrienta confrontación que culminó con las negociaciones de Brest Litovsk frente al gobierno triunfante de Vladimir Ilich Lenín, el pretexto, la “causa”, querer expandir su mercado a nuevos territorios.

Pasaron 27 años y nuevamente para destruir a la URSS y argumentando que Alemania necesitaba “su espacio” vital el 22 de junio de 1941 Hitler la invadió (Napoleón lo había hecho un 23 de junio) con un ejército de 3.8 millones de soldados que formaban la operación “Barba Roja”. El resultado fue (cómo todo mundo sabe) un rotundo fracaso frente al pueblo ruso y su ejército, quien liberó su país y a la mayoría de los pueblos invadidos por los nazis, llegando hasta Berlín.

Hoy la historia se repite. EU y la OTAN atacan a Rusia usando a los Nazis ucranianos como punta de lanza.

Es claro que la ofensiva contra Rusia no busca llevar la democracia ni los valores occidentales, ni ayudar a los pobres de Ucrania, sino destruir al país, controlar sus recursos y la riqueza rusa y claro está, que otro de sus objetivos es derrocar a Vladymyr, Putin, quien con su liderazgo a logrado revertir los efectos desastrosos de los gobiernos de Gorbachov y de Boris Yeltzin. Finalmente pretende cercar por el oeste a la República Popular China para someterla y así controlar a todo el mundo.

Pero, cómo se ha expuesto aquí, el pueblo ruso como lo ha demostrado históricamente sabe defenderse y lo está haciendo, y saldrá triunfante. De todo esto resultará la derrota del imperialismo.